
Ciudad Altamirano es cabecera del municipio de Pungarabato, perteneciente a la región de la Tierra Caliente en el estado de Guerrero. Se sitúa junto al Río Cutzamala, la cual delimita al norte del municipio y a Guerrero con su entidad vecina, Michoacán.
Ciudad Altamirano tuvo como nombre primitivo el de Pungarihoato que en purépecha significa cerro de las plumas. Se llamó así por que en tiempos prehispánicos el pueblo estaba en un cerro donde se elaboraban bellos mosaicos de plumas multicolores famosos en el imperio mexica. Pungarihoato (que después se deriva en Pungarabato) es conquistado por los purépechas enviados desde las riberas del lago de Pátzcuaro por el célebre triunvirato de los reyes Hiripan, Tangaxoan e Hiquíngari. Esto sucede entre 1410 y 1415 y se le conquistó junto con ‘’Cuyucan’’ (Coyuca), ‘’Apatzingani’’ (Cutzamala) y Sirándiro (Zirándaro). En Pungarabato adoraban al dios Punguarancha (‘’ídolo con plumas’’) que era el dios mensajero del Apatzi, el dios tarasco de la Muerte que veneraban en Apatzingani (hoy Cutzamala). En Apatzingani tenía el rey Tzitzipandacuare una guarnición de diez mil guerreros purépechas desde 1480, que se enfrentaban a los mexicas que el emperador Axayácatl tenía en el fuerte de Ostuma, a unos cuantos kilómetros. Pungarabato, Cuyucan, Sirándiro y toda la región tenían que enviar bastimentos y hombres a Apatzingani para sostener la guarnición.
En la época Colonial, se crea la encomienda de Pungarabato en 1526 siendo el primer encomendero don Pedro de Batzán que la comparte con Fernando Alonso de Villanueva. Después de largo juicio le queda la encomienda a don Pedro, que al morir la hereda a su hijo Hernando de Batzán. Otros encomenderos fueron Juan Velázquez de Salazar, Ángel de Villafaña, Alonso Gutiérrez de Badajoz y Antonio de Anguiano.
En lo eclesiástico, Pungarabato perteneció al Obispado de Michoacán estando dentro de la Jurisdicción de Guayameo. Entre 1552 y 1554 llega el agustino Fray Juan Bautista Moya a Pungarabato que lo escoge como su residencia y desde ahí se traslada a toda la Tierra Caliente construyendo iglesias, fundando y repoblando pueblos. Permanece ahí hasta 1567 en que enferma y se le traslada a Valladolid (hoy Morelia) en donde muere en diciembre del mismo año. Entonces, los curatos de Pungarabato y Cutzamala se sostenían de la gran bonanza que daban las seis minas que estaban en el cerro Alba de Liste, en Cutzamala. En 1828, el cura de Pungarabato, don Tomás Arriaga, extrajo un ídolo de oro de las yácatas de Pungarabato que llevó a don Ángel Mariano Morales a Morelia y que era el Obispo de Michoacán.
Al crearse el Estado de Guerrero en 1849, Pungarabato envía una comisión a la ciudad de México a pedir al Presidente de la República que les permita seguir siendo parte del Estado de Michoacán. Así se hace, y es hasta 1907 cuando Pungarabato junto con Zirándaro pasan al Estado de Guerrero por un decreto de Porfirio Díaz.
En 1936, se cambia el nombre de Pungarabato por el de Ciudad Altamirano, por Decreto del gobierno del Estado de Guerrero, quedando aquel antiguo nombre sólo al municipio y no a la cabecera.
Hoy Ciudad Altamirano es una de las ciudades más importantes del Estado, pues según las estadísticas es la segunda (después de Acapulco) que más comercio maneja.
Por cierto, es la tierra de Manuel Negrete.
FUENTES:
Página web del municipio de Pungarabato: http://www.pungarabato.gob.mx/
Enciclopedia de los Municipios de México: http://www.e-local.gob.mx/work/templates/enciclo/guerrero/municipios/12050a.htm
Enciclopedia Encarta: http://mx.encarta.msn.com/encnet/refpages/RefArticle.aspx?refid=961535168&vv=600